Con las pruebas iniciadas ya en algunas comunidades, el Gobierno publica hoy en el BOE la Orden ECD/393/2017, de 4 de mayo, por la que se regulan las pruebas de la evaluación final de Educación Secundaria Obligatoria, para el curso 2016/2017.
La orden establece que las pruebas deben realizarse en los meses de mayo y junio, pero las Comunidades tienen libertad de elegir la fecha, y no es obligatoria para todo el alumnado, basta con que sea "suficiente para obtener datos significativos". Señala también que podrán durar un máximo de cuatro o cinco días (en comunidades con lengua cooficial), e incluirán cuestionarios de contexto.
En Asturias está previsto que se celebren los días 23 y 24 de mayo y se someterán a ellas un tercio del alumnado tanto en Primaria (6º) como en Secundaria (4º ESO)
El Gobierno aprueba la orden que regula las pruebas de 4º de ESO con algunas ya en marcha
- La Rioja empezó a realizar la evaluación el jueves
- Los exámenes no tienen efectos académicos
El BOE recoge hoy la orden que regula las evaluaciones finales de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), aprobada hace dos días, el 4 de mayo. La norma entra en vigor mañana, pero llega tarde. La Rioja empezó a realizar esas pruebas el pasado jueves, el mismo día de su aprobación pero antes de su publicación y entrada en vigor. Así, el texto entra en vigor después de que, de facto, se esté aplicando.
Otras comunidades autónomas empezarán a evaluar en breve. Madrid las realizará el 19 de este mismo mes y Galicia, entre el 23 y el 24, por ejemplo. Murcia ha planificado que arranquen el 12 de junio. La orden establece que se deben realizar en los meses de mayo y junio, pero cada comunidad tiene libertad para elegir fecha en esos meses.
En diciembre, el Gobierno aprobó un Real Decreto-Ley que dejó en suspenso la puesta en marcha de las reválidas de ESO y Bachillerato establecidas en la LOMCE. De esa forma, cedió en parte a las peticiones de la oposición y la comunidad educativa y, por un lado, devolvió la prueba de Bachillerato a su función anterior: entrar a la universidad; y, por otro, convirtió la evaluación final de Secundaria en una prueba muestral, a realizar solo en algunos centros y sin efectos académicos.
Este cambio obligaba a aprobar una nueva orden ministerial que estableciera cómo iban a ser estas nuevas pruebas. Se hizo con las pruebas de acceso a la universidad pero, hasta hoy, con algunas evaluaciones ya en marcha, la orden que regulaba la evaluación final en ESO no había llegado al BOE.
Una muestra “suficiente” para obtener datos
La orden que entra en vigor mañana no marca unas cifras concretas, pero establece que “la selección de alumnos y centros será suficiente para obtener datos representativos”. Las comunidades autónomas han optado por elegir algunos de sus centros escolares.
La mayor diferencia con respecto a la idea inicial del Gobierno, además del hecho de que no sean obligatorias para pasar de curso y se realicen solo a efectos estadísticos, es que estas nuevas pruebas evalúan solo las materias de Lengua y Literatura (también la extranjera y cooficiales, si las hay), Matemáticas y Geografía e Historia. En su diseño primario, eran un examen final de todas las materias troncales, dos opcionales y una específica.
Es obligatorio que, al menos, un 20% de las preguntas sean abiertas o semiabiertas, y se centren en los contenidos establecidos en la orden publicada hoy. En paralelo a las pruebas, se repartirán cuestionarios anónimos de contexto a alumnos, familias y centros para analizar la situación económica, social y de medios de todos ellos.
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